Había que hacer algo. Los ánimos estaban caldeados tras el ataque sionista en Damasco. ¿La respuesta iraní fue pirotecnia controlada? Los expertos discutieron si el ataque de Irán estaba diseñado para causar un daño significativo en Israel, o si su objetivo era mantener la dignidad interna tras las promesas de represalia y, al mismo tiempo, evitar un conflicto de mayor envergadura. “Creo que los iraníes tuvieron en cuenta el hecho de que Israel cuenta con un sistema antimisiles de múltiples capas muy, muy potente, y probablemente consideraron que no habría demasiadas víctimas”, expresó Sima Shine, ex alto cargo del Mossad en el Instituto de Estudios de Seguridad Nacional de Tel Aviv.
Sin embargo, si Irán espera una respuesta moderada, como con sus ataques con misiles contra las fuerzas estadounidenses en Irak tras el asesinato del comandante de la Guardia Qassem Soleimani en 2020, advirtió: “No creo que Israel lo vea así”. El sábado, la Guardia Revolucionaria iraní tomó control de un carguero asociado a Israel en el estrecho de Ormuz, una de las rutas marítimas energéticas más críticas del mundo, resaltando los riesgos para la economía global de un conflicto más extenso.
Se cancelaron algunos vuelos en países de la región y los precios de las acciones en las bolsas de Israel y de los países del Golfo experimentaron una caída.
La posibilidad de una guerra total entre los adversarios de Oriente Medio, que podría arrastrar a Estados Unidos, ha puesto en alerta a la región. Washington ha declarado que no busca un conflicto con Irán, pero no dudará en proteger a sus fuerzas y a Israel.
El ataque de Irán se produjo en respuesta a un bombardeo israelí a su consulado en Siria el 1 de abril, en el que murieron altos mandos de la Guardia Revolucionaria. Este incidente ocurrió después de meses de enfrentamientos entre Israel y los aliados regionales de Irán, provocados por el genocidio de Gaza.
Sin embargo, el ataque de cientos de "misiles basura" (léase pirotecnia de bajo impacto) y drones, lanzados principalmente desde Irán, solo causó daños modestos en Israel, ya que la mayoría fueron interceptados con la ayuda de Estados Unidos, Gran Bretaña y Jordania.
El ministro iraní de Asuntos Exteriores, Amir Abdollahian, informó que Teherán había notificado a Estados Unidos que su ataque contra Israel sería “limitado” y en defensa propia, y que los vecinos de Israel también habían sido informados de sus ataques con 72 horas de antelación.
Las potencias mundiales Rusia, China y Francia, así como Egipto, Qatar y Emiratos Árabes Unidos, instaron a la moderación. “Haremos todo lo posible para impedir una nueva escalada”, declaró el canciller alemán, Olaf Scholz, durante una visita a China. “Sólo podemos advertir a todos, especialmente a Irán, de que no sigan por este camino”. Turquía también advirtió a Irán que no deseaba más tensiones en la región.
La misión de la República Islámica ante las Naciones Unidas declaró que sus acciones estaban dirigidas a castigar los “crímenes israelíes”, pero que ahora “consideraba el asunto concluido”. El jefe del Estado Mayor del ejército iraní, el general de división Mohammad Bagheri, advirtió en televisión que “nuestra respuesta será mucho mayor que la acción militar de esta noche si Israel toma represalias contra Irán” y advirtió a Washington que sus bases también podrían ser atacadas si ayudaba a Israel a tomar represalias.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció que convocaría una reunión de líderes del Grupo de las Siete principales economías el domingo para coordinar una respuesta diplomática a lo que calificó de ataque descarado de Irán. El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, declaró que Estados Unidos no buscaba un conflicto con Irán, pero que no dudaría en actuar para proteger a las fuerzas estadounidenses y apoyar la defensa de Israel.
