La de este martes fue una jornada que recordó épocas oscuras, tanto como lo que podía preverse cuando La Libertad Avanza llegó al poder apoyada por lo más a la derecha quie la derecha argentina tiene para ofrecer. En un solo día hubo dos episodios que ensombrecen a la democracia y que parecen ser solo una parte de lo que nos resta ver en esta era de la ultra en el país.
A la denuncia que el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, presentó contra los periodistas Darío Villarruel y Nancy Pazos por sus opiniones sobre el Gobierno, se le sumó la presencia de una custodio de la funcionaria Leila Gianni, la conversa que hace unos años se tatuó un pingüino en homenaje a Néstor Kirchner, en 2023 militó a Sergio Massa y hoy es una funcionaria que habla de "jueces militantes" y aborrece lo que pensaba hasta anteayer.
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Gianni, subida a la ola ultra (por la que borró todas las fotos que había publicado en redes de sus tatuajes kirchneristas) participó este martes de una audiencia judicial en la que fue cruzada en duros términos por el dirigente social y exprecandidato presidencial Juan Grabois, quien le echó en cara su lugar saltimbanqui en la política y la acusó de robarle la comida a los pobres.
En la escena, ocurrida en los pasillos de los tribunales de Comodoro Py, pudo verse a una custodio del ministerio de Capital Humano (donde, como otros ex massistas, Gianni opera como empleada de Sandra Pettovello) portando un arma y exhibiéndola cuando Grabois se acercaba a Gianni en momentos álgidos de la discusión.
La situación del arma explícita hizo explotar otro escándalo. Y Grabois no se guardó nada. Horas después de lo ocurrido el dirigente apuntó y disparó en redes sociales.
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"Pettovello, después de corroborar que esta persona /la custodio armada) o pertenece a la custodia de Comodoro Py le pregunto ¿Por qué había (al menos) una persona de civil de su grupo de "seguridad" con un arma de fuego dentro y fuera de la sala de audiencias?", comenzó Juan Grabois, que además se preguntó: "¿No sabe que eso está estrictamente prohibido? ¿Van a repetir lo que hicieron con Federico Fernández en el piso 15 de la Secretaría de Trabajo cuando le pusieron un arma en la cabeza para que firme una declaración jurada inculpando a un funcionario y liberándola a usted de culpa y cargo por contrataciones que usted firmó (conf. LPO y otros)?".
En un puñado de párrafos encendidos, el referente social continuó y le advirtió a la ministra preferida de Javier Milei: "A nosotros no nos van a intimidar ni con armas ni con calumnias. La lucha sigue hasta que no falte pan en la mesa de ningún argentino. El hambre es un crimen y ustedes una banda criminal".
Luego pisó el acelerador y envió un mensaje "a la ciudadanía, la prensa libre, el Poder Judicial y la oposición republicana". Y dijo: "Acá hay una verdadera mafia operando en Capital Humano".
Y fue por más: "Roban, espían, borran pruebas, pasan facturas truchas, adulteran inventarios, usan patotas armadas. Es muy grave. Hay mucha gente intimidada que no se anima a hablar".
Sobre la situación mencionada de la "reunión" en la que se "apretó" a un testigo, Grabois aportó más información.
"Ariel Romano, el abogado que está junto a la persona armada, participó en la "reunión" del piso 15 donde a Federico Fernández le arrancaron la declaración que exculpa a Pettovello. Ese hecho por sí solo reviste una gravedad que requiere la inmediata intervención de la justicia por la posible comisión de delitos gravísimos tales como la coacción y la privación ilegítima de la libertad".
Por último, apuntó que "si hacen esto para no repartir comida, imagínense de lo que pueden hacer para saquear la Argentina".
"La patria no se vende. Defendámosla sin miedo", concluyó.
Pettovello, después de corroborar que esta persona no pertenece a la custodia de Comodoro Py le pregunto ¿Por qué había (al menos) una persona de civil de su grupo de "seguridad" con un arma de fuego dentro y fuera de la sala de audiencias? ¿No sabe que eso está estrictamente… pic.twitter.com/V3EBSj8QsY
— Juan Grabois (@JuanGrabois) June 5, 2024