Científicos del Grupo de Trabajo sobre el Antropoceno (AWG, por sus siglas en inglés: Anthropocene Working Group) que trabajan en investigar sitios que demuestren que el Antropoceno ha llegado, tienen a su candidato ideal: el lago Crawford, en Canadá.
El Antropoceno es una propuesta de época geológica que dejaría atrás al Holoceno y está caracterizada por el impacto significativo de la actividad humana sobre el planeta. Quien popularizó el término, el holandés Paul Crutzen (premio Nobel de Química), esperaba que el concepto y su comienzo fuera un grito de alerta acerca de los desafíos climáticos que se avecinan.
En geología, la historia de nuestro planeta se divide en eones, eras, periodos, épocas y edades, siendo un eón el periodo de tiempo más largo y una edad el más corto. De aprobarse, el Antropoceno sería la tercera época del Cuaternario. También significaría que la Época Holocena fue especialmente corta, otras épocas han durado varios millones de años.
Para que eso suceda esta votación debe ser sometida primero a la Comisión Internacional de Estratigrafía (rama de la geología que estudia la edad y composición del subsuelo a través de sus estratos). Luego deberá ser estudiada por la IUGS, la máxima autoridad en la materia.
El AWG es un equipo formado actualmente por 35 geólogos, que lleva trabajando desde 2009 para que el Antropoceno forme parte de la cronología oficial de la Tierra. En 2016, determinaron que la época del Antropoceno comenzó alrededor de 1950, el inicio de la era de las pruebas de armas nucleares, cuyas huellas geoquímicas pueden encontrarse en todo el mundo.
¿Por qué el lago Crawford?
Este lago, ubicado en las cercanías de la ciudad canadiense de Toronto, y queda a solo unas decenas de kilómetros de la ciudad industrial más grande de Canadá, Hamilton. El sedimento extraído del lecho revela las huellas geoquímicas de las pruebas de bombas nucleares, concretamente de plutonio, un elemento radiactivo ampliamente detectado en todo el mundo en arrecifes de coral, núcleos de hielo y turberas.
"La forma (del lago) restringe la mezcla de la columna de agua, de modo que las aguas del fondo no se mezclan con las de la superficie. El fondo del lago está completamente aislado del resto del planeta, salvo por lo que se hunde suavemente hasta el fondo", explicó Francine McCarthy, profesora de Ciencias de la Tierra de la Universidad de Brock en Canadá.
En los sedimentos de Crawford, los científicos pueden detectar fácilmente la aceleración de los cambios año tras año.
El lago es el lugar ganador para ubicar la espiga dorada, que es el indicador con que se marca una sección estratotipo y punto de límite global (GSSP en inglés), después de que el AWG votara por otros nueve sitios. Esta espiga se trata de literalmente un clavo de bronce inserto en algún acantilado que se considera de gran importancia científica.
